the shard of white…
trembling with white light
with white flat sea
distant in memory
between the deluge of life
our dearest, our white youth,
our white, our snow white youth
that is infinity…
Cy Twombly, de Summer (Estate)
[. . .] UN RECUERDO LEJANO
[. . .]
de los cuerpos [. . .]
entre ellos
[. . .]
el diluvio
[. . . y la trilla
y las yeguas al galope
triturando las cortezas
y la cáscara del trigo
en la mente
un emplaste de luz sucia el polvo
quieto
casi vuelto a ser estrato
de un lago que era mar
a mitad del Pleistoceno
y en la tela
falo verde, flor de sangre el estallido
de una red de filamentos, casi un sol
tres soles sucios
derretidos en el horno de la edad
los lamparones amarillos
de la mierda embarrada por los hombres que degüellan a los cerdos
en el sueño de verano en Gaeta
el fantasma de los bueyes barbechando una
yunta una
pala entre el iris
y el cerebro el halo turbio de la luz
la costra roja
del sudor sobre la nuca
el barro espeso
una loza en el instante de fricción
de las caderas
y los brazos
y las piernas retorcidas en la tierra
de tan tiernas
el recuerdo
una brasa de azafrán
entre los tallos y espigas de otro tiempo
el olivo
el espliego que ahuyenta
a los bichos que devoran la hoja verde
y se arrastran en las piedras, en los cráneos
perforados por la lanza
y pelados por el sol
en invierno
la caléndula en la herida el fruto negro del cornejo
si escucharas
si quisieras esperar
si me quisieras…
ah, but
“Spring…
too long…
Gongula…”
todo costura
empalme del instante
en el poema
“the greatest sun on one side
distant in memory
[. . .]
between them
[this] deluge of life [. . .”
para el viejo
que traduce la existencia en grafía
garabato de color
una barca hacia el verano de luz blanca
una pala
para que escarbe sus tejidos cuando palpe
una nueva tumescencia en la vid de las arterias
y en la forja de Seferis
la mujer
que hace apenas un instante era
joven y
hermosa
se arrodilla y ve
(porque es la hora
en la que todos ven por fin
a los caballos arrojarse
hacia el mar desde un barranco
y la mujer se ve a galope sobre el lomo ve
las olas
las rompientes
reventándole
la piel
el cuero rígido y brillante
de la grupa
parra negra ve
su mano muerta
empapada
azotando con la vara al animal
hasta herirlo
y herirse sin saber
de dónde brota tanta sangre
si la sangre floreció entre sus piernas
o en su frente o su cadera si es
la sangre de la yegua o si corre
de la raja donde
rompe
ahora rompe
la marea sobre las piedras
y la espuma cada tanto
echa a tierra a una mujer y le ordena
despertar
que ya es hora no me oyes tienes que
dice quedito la corriente en el lugar
donde se forma el remolino
y se arrodilla ante los cascos
tienes que le dice
oír y
ver la tierra y
desmontar
de una vez
porque es la hora en la que el sol
se arrodilla ante la tierra
y la cabeza y los caballos
se despeñan en el mar
que ahora es joven, como ella
un lienzo en blanco
para el pez embarrancado en una playa
donde sueña con membranas
y placentas
con la forma incipiente
de los pliegues del cerebro
enroscado
como un cabo elástico
y largo
que se tiende sin reservas
a la especie dominante
Autor
Ricardo Cázares
Ciudad de México, 1978. Es autor de los libros <> (Palas vol. 2, 2017), <> (Palas vol. 1, 2013, Premio de Poesía Joaquín Xirau Icaza 2014), Es un decir (2013) y Drivethru (2008). Dentro de su trabajo como traductor destacan la primera traducción completa al español de Los poemas de Maximus de Charles Olson y la antología de poesía experimental Renacimiento de la poesía inglesa, entre otros. Es editor y miembro fundador de la editorial Mangos de Hacha. Actualmente forma parte del Sistema Nacional de Creadores de Arte.