La ampolla incómoda del lenguaje
| Inéditos, Visual
Ilustraciones de Agenda Gestual
Umbral de Betania
Vagina de alabastro/ llama para volver al origen/ Una vulva tallada en piedra/ blanquecina y rosada/ Genera, claro, su propia sombra// Una que muchos podrían pasar por alto/ No es la canónica pieza de Louise// Ni violenta ni visible/ tampoco la más fotografiada// Permiso para entrar por aquí/ (La parió la serenidad)/ ¡Coño!/ (Cunt I, untitled femme, 1969-70)/Vendida en 25 000 euros/ ¿Le gustaría comprar un objeto similar?/ Casa de subastas/ Lote 869/ Vulva de 17 x 7 x 5 centímetros/ Dice: objeto único/ Perteneciente a una colección privada en Nueva York// Nota: la mujer de Betania vertió perfume de nardo sobre la cabeza de un hombre/ El recipiente era del mismo material que esta escultura //
Vulva y Betania/ ungüento de nardo para vestir pensamientos
oraciones
formas de mirar
ensamblar
las piezas de Louise
LO QUE ESCUCHÓ LOUISE DE SIETE AÑOS:
la risa de su madre, sábanas rasgadas
piedras mientras camina al colegio
campanas en el salón de clases
un campo de lavandas
y el gemido de las chicharras
LO QUE ESCUCHÓ DETRÁS DE LA PUERTA:
(celda VI, 1995)
LO QUE NO VIO BAJO LA CAMA:
los zapatos de su primer novio
un boleto de tren
una madeja de hilaza azul rey
LO QUE TOCÓ DESPUÉS DE MUERTA:
los senos de su primera madre
siete botes de tinta roja que no usaría
108 piedras sin pulir
y los bordes de la palabra REPARAR
LO QUE DIJERON SUS AMIGOS:
LO QUE RELACIONARON SUS BIÓGRAFOS:
cada palabra encapsulada con cinco mordidas
cada textura con algo nunca dicho
cada logro: con un curador
cada curador con su cuchillo
cada cuchillo
sin tarea
y una lectura siempre pendiente
LO QUE SU OJO INTERIOR NO PUDO VER:
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TAN TIRIRIRAN TIN /celda sin número
De la abuela materna y el sillón azul/ un mimo y un conejo de chocolate// O del conejo que se sentó sobre un sillón turquesa a meditar acerca de la soledad injustificada y la poesía// Antesala, espacio de espera, minutos antes de entrar a la recámara:
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1. Nunca me asomo por la ventana. Las cortinas son pesadas.
2. El hijo menor quizá juegue en el jardín. Hay un columpio rojo sin número. Se balancea como la infancia que no logramos limitar. (Los parientes cercanos se llevaron las joyas… A mí solo me interesa el tapiz de sus sillones: dorado y azul turquesa).
3. El clóset siempre abultado de Dolores. Dos cosas de mi interés: conejos de chocolate y una caja de música. El mimo se balancea con el dictado de la cuerda. Sus piernas flojas se mueven sin control ¿Feliz o entristecido?
(Cómo iba a saber que tendría un hijo alcohólico) tan tiriririran tin,
tan tiriririran tin… El arlequín baila sin atropello. Notas sórdidas, nunca sordas.
¿O eran sordas, nunca sórdidas?
AMPOLLAS:
¿Qué empollas?
Protuberancia existente,
legado del padre,
ampolla o callo del escritor,
ámpulas,
líquidos que secretamos para sanar,
sobreesfuerzo.
La ampolla incómoda del lenguaje,
los poetas astutos,
la reverencia exacerbada al maestro,
ampollas horizontales:
los congéneres.
El amor que no se dice,
el que crece hacia adentro
como una lengua terca y ácida.
La ampolla reventada.
ALIVIO
Ampollas infantiles.
Celda VII / Escenario doméstico / 1998
Amo los espacios claustrofóbicos,
así conoces tus límites
L. B.
La cita a la cual no estás invitada:
hendidura hueco de la chapa mirilla.
Polígono para observar.
Los objetos que aquí se ven:
reliquias familiares,
actos de parientes que aquí estuvieron.
Babydoll,
semidesnudez de la madre,
una que no siente miedo en la habitación.
Esta vez empequeñecida como una araña
o sus palabras sin sonido.
La memoria y el deterioro de la puerta,
el gris y no me veas tal cual soy:
incómoda.
Reúno objetos,
palabras,
confronto lo que no pude mirar:
¡camisón!
máscara de monja,
chaqueta blanca de quince años
y una escalera en espiral.
La araña teje,
mi madre estropea algunas palabras.
* Poemas pertenecientes al libro inédito Arquitectura Doméstica (Prótesis y una lectura de Louise), a partir de la obra de Louise Bourgeois.



Kenia Cano / Cuernavaca, Morelos, 1972. Poeta y artista visual. Autora, entre otros, de los libros de poesía Oración de pájaros (2004), Del amor ileso (2008), Un animal para los ojos (2009) y Las aves de este día (2009), por el que recibió el Premio Iberoamericano de Poesía Carlos Pellicer. Entre sus libros de artista, donde se combina lo visual y lo textual, se encuentra Imágenes para la boca inquieta de mi padre (2016). Su libro más reciente es Diario de poemas incómodos (2017), que incluye una muestra fotográfica de un diario intervenido.