diciembre 2024 / Traducciones

Quiero decir que el yo no está unido a un solo cuerpo

 
Versiones al español de Judith Santopietro; edición de María Cristina Hall.

 

Después de (un poema en evolución)

1.

Marcha, como el soldado, en la insistencia sonora de la respiración
Respira en el minuto en el minuto    en el
instante           respira            respira            respira
Cuerpo  reposa           Cuerpo  extirpa los restos, después respira    respira

Cuerpos arrestados   Cuerpo  reposa  cuerpo arrebatado  cuerpo que se recuesta como/en descanso
Cuerpo  reposa   cuerpo arrancado       arrestados cuerpos (amados)          
el cuerpo político es/se precipita en un
de
   clive

Cuerpo  reposa en cada respiro          en cada aliento            al exhalar
Reposa el cuerpo en cada respiro que tomamos

Los cuerpos descansan en cada respiro del cuerpo político que cae
Cuerpo  reposa en el alivio sonoro de (t)uestro decir    una lengua atiende tiernamente

Cuerpo arrancado de su reposo en la terquedad sonora de nuestro ser
   marchamos moviéndonos como un nosotros sin sargento, libres

2.

Pero si te amo, lo que somos es importante a cada mañana,
a cada tarde, a cada noche que se aparta.

Pero si te amo, el tiempo se vuelve irrelevante e incontable. No es sencillo
contar cómo llega el tren, cómo atraca el barco.

Pero si te amo, no es sencillo dibujarte como cualquier otro, delineado
en la agonía de las marcas comerciales y del marketing

La llegada y sus posibilidades, felicidad visible que florece
La partida y sus posibilidades, felicidad extensa del desierto

Pero si te amo, tú no eres yo,
y danzamos a lo largo de caminos discontinuos, inconexos.

Pero si te amo, amaré a muchos más en la multiplicidad que soy y que amo

 

In the After (a poem in/on progress)

1.

March, like the soldier, through the sonic insistence of breath
Breathe in the minute in the minute   in the moment             breathe             breathe             breathe
Body rest         Body wrest away the rest, then breathe            breathe

Bodies arrested            Body  rest         body wrested   body resting in/as recline
Body rest         body wrested    bodies arrested (who are loved)            body politic is/as de     cline

Body rest in each breath           in each breathe             in breathing
Body rests in each breath we take

Bodies rest in each breath taken by the body politic’s restless decline
Body rest in the sonic soothing of (y)our saying           a tongue tenderly tending

Body wrested from its resting in the sonic insistence of our isness
   we move through by moving as an unmarshalled we

2.

But if I love you what we are is of consequence each to the morning,
each to the afternoon, and to the evening’s retire

But if I love you, time is immeasureable and irrelevant. There is no easy
accounting of the train’s arrival, of the ship’s docking

But if I love you, you are not drawn as an easy other, conscripted
in the agonies of marketed and marketing brands

Arrival and its possibility are verdant present joys
Leaving and its possibilities are expansive desert joys

But if I love you, you are not me,
and we dance along our incongruous, broken roadways

But if I love you, I will love many in the multiple that I am and that I love

 

Historia de la perra o Hdlp: Hood Hauntings (acechar el barrio)
(para Walter Hood)

En este momento, de pie aq/llí, entre ustedes,
en este pedazo de tierra, nuestro destino, por ahora

quiero decir que el yo
no está unido a un solo cuerpo
La tierra es, después de todo, una constelación
planetaria que empuja más allá
   de nuestros cálculos cuidadosamente acorralados

Quiero decir que el yo
no está unido a un simple yo
   La ternura con que ella toma la bufanda de su amante
   nos dice todo lo que no revelará
   sobre él y su tacto, sobre ella y su deseo mudo

Quiero decir que el yo
no está unido a un solo yo

   Y la suavidad con que aquel adicto con barba se abraza
   el torso, cenizo, con sus delgados brazos, es señal
   de lo que no podemos sostener.

Quiero decir que el yo
no está unido a un simple cuerpo

   Le incrédule, reconocide como él/ella, parade
   entre ríos y encrucijadas, sueña en órbitas
   de certeza que sólo pueden hacer corto circuito en alguien como él/la.
 
Quiero decir que el yo
no está unido a un solo cuerpo

   El optimista nunca ha visto
   los esquistos debajo del musgo. Y el pesimista
   se rehúsa a mirar el cielo en el exterior de la mina,
      y se rehúsa a entender que el pasado no es para siempre
      y que no es es lo mismo que un será.

Quiero decir que el yo
no está unido a un solo cuerpo
   La mujer solitaria, que bien lo sabe, le llora
   a su yo forjado de preocupaciones y palabras.
   Se refugia con los brazos llenos de ausencias
      le es más llevadero que la estridencia de los vecinos
      ¿Qué es un yo sin ti, sin ellos?

Digamos que lo que yo quierodecir, entonces

es decir que el yo
no está unido a un solo cuerpo

   es soñar en tiempo real, tiempo, tiempo, tic-tac tic-tac
   es un conjuro cósmico del pasado
      las rejas de metal, pasando
      el pasto crecido y recortado, pasando
      los congregados de hoy en el barrio, pasando
      el pasado omnipresente que no hay cómo filtrar

Decir que el yo
no está unido a un solo cuerpo

   es hacerle lugar a la niña convertida en amante convertida en madre
   que respira por un instante por otro,
   es asumir que cada yo sólo
   existe en el abrazo del Nosotros,
   aunque sólo sea una idea del nosotros

¿Y yo misma?
Mi yo no es un cuerpo, no es un cuerpo único plantado
   entre estrellas, entre cosas, entre pensamientos, entre palabras,
   entre sílabas, carritos del súper, entre bocanadas y cajas.

Mi ser no se limita a las fronteras de mi cuerpo
porque en la espesura del mundo, existimos

Yo soy porque nosotros somos
y Nosotros      nosotros somos sobre todo espíritu: bálsamo y machete.

 

A History of the Bitch or AHotB: Hood Hauntings:
(for Walter Hood)

At this hour, standing t/here, among you,
on this bit of earth that is our momentary lot

I want to say that the self
is not to a single body bound
Earth is, after all, a planetary
constellation pressing past our
   cautiously corralling calculations.

I want to say that the self
is not to a single body bound
   The tender ways she holds her lover’s scarf tells
   us everything she won’t say
   about his touch, about her quiet wanting

I want to say that the self
is not to a single body bound

   And the gentle way the bearded addict folds
   his lanky arms across his torso, ashen, is a semaphore
   for what we cannot hold

I want to say that the self
is not to a single body bound

   The doubter, situated as s/he is
   at road-forks and rivers, dreams in circuits
   of certainty, that can only short-circuit one such as s/he.

I want to say that the self
is not to a single body bound

   And the optimist has never seen
   the schist for the moss. And the pessimist
   refuses to see the sky beyond the mine,
      and refuses to see that was is not always,
      and that is is not will be.

I want to say that the self
is not to a single body bound
   And the loner, who knows this, cries
   To her self wrought of words and worries.
   She hunkers down with her arms full of absences
      more bearable than the gregariousness of neighbors
      What is an “I” without you or them?

Say I want, therefore

To say that the self
is not to a singular body bound

   is to dream in real time, time, time, tock
   is a cosmic conjuring of past
      the metal fences, past
      the clipped and cultivated lawns, past
      today’s neighborhood congregants, past
      the omni-present past there’s no way of filtering out

To say that the self
is not to a singular body bound

   is to make space for the girl become lover become mother
   who breathes, for a time, for another,
   is to embrace that each I is
   only in the company of We,
   even if only an idea of we

And myself?

My self is not a single body, is not a body singularly situated
   among the stars, among things, among thoughts, among words,
   among syllables, among shopping carts, among breaths and boxes

My self is not by my body’s boundaries bound
In the thicket, we are

I am because we are
   and We            we are mostly spirit–salve and machete

 

En/somniloquios

   Las lombrices no son gusanos
   comerlas no es plantar
   árbol o bandera

ella quiere gritarle
a la tele cuando una tal Susy sorbe
lombrices de una taza.

quiere gritarle
a la idea de que lo hecho/por venir
está graba/paga(do)

   Las lombrices no son di-
   gestores ni una dis-tracción
   del ruido callejero de la esquina.
 

Pensarías que una mujer
tendría más criterio, piensa ella. Este pensamiento
una ardilla en el césped.

 

Pensarías que una mujer
   —hay pensamientos de otras mujeres.
Más ardillas.

 
 
Su madre: sería terrible
que te perdieras de tener sexo, cuando
quiso ser monja.

Su madre: Cuéntame,
¿qué sabes tú
de los hombres?

cuando mandó una carta a casa en que hablaba de su amante cuya madre le
  enseñó a tejer.
Cuando mandó una carta a casa en que hablaba de tejer, aún era una
  chica-ingenua,

aún era la chica que escribía “somos los rostros que llevamos puestos”. ¿Dónde? En una escena del pasado,
aún era la chica con un rostro como pantalla de cine, que tejía gorros con

lana roja como sangre de caricatura, roja como las zapatillas de Mammy Two
  Shoes, cabezas de cerillo,
lana roja como labios y lenguas de caricatura, roja como paliacates y granadas

roja como sangre en mariposa mancha que atraviesa el blanco de los shorts de
  verano,
roja como sangre que dice mujer, quizá madre, que dice mira y toma nota,
roja como pasteles red velvet que descongeló y se comió por dos meses cada
  aurora en la hora del luto,
roja como las cortinas aterciopeladas con las que hubiera querido cubrir aquel
  momento,
roja como la aurora, como la ira, como la vergüenza, como los platos de las
  ofrendas en la iglesia
roja como la hora del luto, como un alto que pasas de largo en el tráfico, como
  una rebanada de carne,
roja como las cerezas del ahora y del después, como labios de cerdo en
  escabeche, como nudillos golpeados,
roja como paletas de cereza, como chicle rojo, como anuncio de “no deambular”
  antes de dormir,

 
roja como las abejas distantes de Red Hook embriagadas con cocteles de
  cereza fungicida,
roja como el espacio distante mapeado comprado y controlado por un dictamen
  brutal,
roja como la administración de las zonas rojas y las cuadras acordonadas,
roja como la administración de la necesidad, como el palpable y prolongado
  adiós,
roja como ardillas rojas, como maples, como distritos
montados e iluminados para el deseo,
roja como ardillas rojas —norteamericanas, euroasiáticas, nativas, migrantes,

 
roja tan roja como el mismo rojo. Tan roja como el culo rojo de un babuino.
  Bueno, ya cállate.
… roja como rojo-culo-rojo, como infiltradas palabras el hubiera no exis… ya
  sabes.

Roja como el subjuntivo lo que sea el culo de lo tomado de lo derribado,
roja como estar subyugado a límites y líneas mercantilistas.

Un día de letra escarlata en la zona roja de la noche insomne,
Un día de letra escarlata para ver el temor rojo hasta perder la razón

rojo extraído de la raíz de rubiácea que le confiere grandilocuencia al ermitaño
  (y a la mujer, infamia),
rojo extraído de la cáscara del palo de Brasil que chuleó las túnicas de un papa,
  vulva prostituida por un chulo,
rojo extraído de la arcilla, de la cochinilla triturada, de la grana, de los gusanos
  disecados y hechos polvo,
rojo extraído del cinabrio minado por esclavos, por prisioneros, por los no-yo,

rojo como una brújula, un calibrador, una franja, una huelga, como matiz de la
  matriz del hogar,
roja como brújula, medida de luz que recorre los bordes de 620 a 740 nm

roja como estuvo aquí, como convertirse, como devenir en un no aquí,
roja como nota y huida y no…

cada rojo una nota que el oído nota y roe, nadas notacionales,
cada rojo una sílaba aborregada en la búsqueda del sueño,
cada rojo una sílaba aborregada que avanza en la búsqueda del caos,
cada rojo un zumbido, un zumbido, un zumbido, un zumbido, un zumbido, un sonido del deseo.

In/Somniloquies

   Earthworms aren’t maggots;
   eating them ain’t planting a
   tree or a flag,

she wants to shout at
her t.v. when some Sue gulps
earthworms from a cup.

She wants to shout at
this idea that there’s p(l)ayback
for what’s done/to come.

   Earthworms aren’t de’
   composers nor dis’traction
   from street corner noise.

 
You’d think a woman
would know this, she thinks. This thought
   a squirrel on a lawn.

 
 
You’d think a woman
   —there are thoughts of other women.
More squirrels.


Her mother: I’d
hate you to miss sex—when she
wanted to be a nun.

Her mother: I’d
like to hear this. What do you
know about a man?

 

when she wrote home about her lover whose mother taught her to knit.
When she wrote home about knitting, she was still girl-incognizant,

still the girl writing “we are the faces we wear.” Where? In flashback,
still the girl with a face like a movie screen, who knit skullcaps with

yarn red as cartoon blood, as red as Mammy Two Shoes’ shoes, matchstick heads,
yarn red as cartoon lips and tongues, red as bandanas and pomegranates,

 
red as blood butterflied across the seat and white of summer culottes,
red as blood that says woman, maybe mother, says watch and count,
red as velvety cakes she thawed and ate over two months mo(u)rning times,
red as velveteen curtains she wanted to drape around this moment,
red as morning, as bluster, as bluff, as the flat of offering plates,
red as mourning, as unheeded signal to stop, as sliced rare meat,
red as cherry now and laters, as pickled pig’s lips, as bruised knuckles,
red as cherry blow pops, as big red gum, as loitering before sleep,

red as distant Red Hook bees drunk on cherry fungicide cocktails,
red as distant space mapped bought and belonging to brutish say-so,
red as the administration of districts and blocked-off blocks,
red as the administration of want, as the red-handed wave so long,
red as red squirrels, as maples, as districts set for and lit with wanting,
red as red squirrels—north American, Eurasian, native, migrant,



  
red, as red as red. Ass red as a baboon’s ass is red. Come on. Stop.
…red as red-ass-red, as the seeping of coulda, woulda…you  know.

Red as subjunctive being being the butt of taken and took down,
red as subjecting being’s becoming to merchandising lines and limits.

A red-letter day in the red-light district of insomniac night,
A red-letter day for seeing red scare the shit out of reason—

red culled from rubia or madder root lends the hermit majesty, (the woman
  infamy),

red culled from sawdust of the brazilwood tree primped a pope’s robes, pimped
  pus(sy),

red culled from clay, from crushed cochineal, kermes, from worms dried and
  ground,

red culled from cinnabar mined by the enslaved, the imprisoned, not-I’s,

red as compass, gauge, as stripe, as strike, as undertone of home,
red as compass, gauge of light cycling the edges of 620 to 740nm,

red as was here, as becoming, as becoming not here,
red as note and gone and not…

each red a note the ear’s noticing and gnawing, notational nothings,
each red a sheepish syllable counted in sleep’s pursuit,
each red a sheepish syllable clocking the pursuit of shit,
each red a buzz, a buzz, a buzz, a buzz, a buzz, a blazon of want.

 

* Estas versiones recibieron el apoyo del programa de residencias artísticas de Casa Ojalá, en la Ciudad de México.

 

 


Autor

Tonya Foster

/ Nueva Orleans, Estados Unidos. Poeta, ensayista y académica. Autora de A Swarm of Bees in High Court (2015) y La Grammaire des Os (2016). Es editora de poesía en la revista Fence. Fue becaria Lisa Goldberg en el Radcliffe Institute de la Universidad de Harvard y MacDowell en Literatura, así como de la New York Foundation for the Arts, del Museo de San Francisco de la Diáspora Africana y de las fundaciones Ford y Mellon. En 2021 ocupó la George and Judy Marcus Endowed Chair en poesía de la San Francisco State University.

diciembre 2024