Negrura de antaño
Negrura de antaño… de siglos que ya se fueron
de cantos antiguos y de mundos viejos
de mi madre fuerte, de mi abuela sabia
de todos aquellos valientes ancestros
Negritud de mi corazón que vibra al sonar de los tambores
de mi alma que canta cuando veo tus colores
que traspasaste el tiempo y rompiste cadenas
que burlaste a la muerte y al destierro;
Negrura que baila y que sonríe
y que se viste de fiesta a pesar del castigo
de frutos recientes y de sangre nueva
de ¡qué hermosura! ¡de orgullo mío!
negritud resiliente tú nunca mueres
porque vives en mi piel, porque corres por mis venas
¡porque sigues aquí! ¡pujante y despierta!
Aleida Violeta Vázquez Cisneros
Hoy florezco
Fui a la bruma, a la oscuridad del ayer
me encontré con tus sueños rotos,
con tus frustrantes cargas;
vi tus egos mal puestos… y rompí el espejo.
Entendí mis vacíos, el miedo a la soledad
encarnado en mis días
desde los amaneceres sombríos de vidas ajenas;
reconocí las trampas del “amor a modo”
escarbé en el dolor que la incertidumbre crea…
Allí… reposé…
me desnudé de adentro… de adentro hacia afuera;
y descargué los dolores en el pozo profundo
de los recuerdos innecesarios…
repasé mis duelos…
curé mis heridas y reinventé mis anhelos.
Osé soltarte, gocé desecharte y romper los lazos;
caminé sin miedo en la senda marchita,
libré los escollos de la desesperanza…
y resolví volver…
Regresar a la estancia de mi ser completo,
a la magia dulce del placer sin miedos,
a abrazarme a mí en el sabio silencio…
esparcí las cenizas de odio en el caudal del tiempo
y el viento las arrebató, se las llevó por completo;
y apagué la luz de tu voz en mi centro.
Y entonces… sólo entonces…
me perdoné… te perdoné…
escupí la rabia y enterré el desencanto en el abismo;
abrí las ventanas y respiré profundo;
labré mi espacio y vencí el tormento;
limpié la brecha al corazón y le puse un huerto;
sembré flores en mi jardín y adorné los tiestos…
y hoy florecen… yo, volví
hoy florezco… hoy sonrío…
hoy florezco con la cara al viento.
¿Y quién soy yo?
Yo soy mar-memoria
Agua-fuego
Luna-hoguera
Amor-lluvia
Soy la irrupción de la vida y la historia inacabada de los tiempos
Soy corazón-tierra
Arrullo-potencia
Útero-poder
Sangre-resiliencia
Soy la lengua perdida de mis ancestras y su eco en mi boca cual punta de lanza
Soy Sol-fortaleza
Canto-bálsamo
Yerba-cura
Piel-valentía
Soy las manos de mil mujeres negras sosteniendo la vida
Soy pasos-puente
Camino-puerta
Sabiduría-belleza
Libertad-resistencia
Yo…
Yo soy una muchedumbre de cimarronas cantando y danzando la vida en poesía.
No me avergüenza ser negra
A ti que me dices negra
con intención de ofender
ponle frenos a tu lengua
no te vaya a hacer caer
pues Dios a mí me hizo negra
y de hermoso parecer
pa’ que el mundo se alegrara
contemplándome a placer
Llevo en la sangre candela
y en mi pecho algarabía
mis ojos son dos lumbreras
que desbordan alegría
son herencia de mi abuela
que de niña me decía:
¡no me avergüenza ser negra!
¡soy fuerza, fulgor y vida!
Autor
Aleida Violeta Vázquez Cisneros
/ Cuajinicuilapa, Guerrero. Escritora y artista interdisciplinaria afromexicana: poeta, cantora, imitadora, bailadora, mediadora de lectura y cuentacuentos. También es divulgadora de contenido antirracista, tallerista en procesos identitarios comunitarios y conferencista. Es defensora de DDHH y activista por los derechos de las mujeres afromexicanas. Es miembra de la Colectiva de Mujeres Afromexicanas en Movimiento (MUAFRO). Como poeta y cantora, se ha presentado en diferentes festivales culturales a nivel nacional e internacional; destaca su presentación con el proyecto "Somos la Costa" junto a las Hermanas García y Chogo el Bandeño, durante la emisión número 50 del Festival Internacional Cervantino (2022). Fue expositora en el ciclo Las Diversas Raíces (2024) de la Coordinación Nacional de Literatura y la primera poeta afromexicana en presentarse en el Palacio de Bellas Artes. Publicó y presentó su primer poemario en el marco del segundo encuentro de Originarias: Mujeres que Escriben Fuera de la Hegemonía (2024), en Pátzcuaro, Michoacán.