No.039_La cédula es la pieza del mes – Julián Herbert

La cédula es la pieza del mes
Julián Herbert

I will show you fear in a handful of dust
T. S. Eliot

: una nota a pie de página. Que la nota usurpe el trono que era el prólogo es ordeno que te asomes (súbdito súbito: y tú que te creías el rey de todo el mundo) por esta cerradura. Asoma. Toma. Dime lo que ves. ¿Cuál cerradura? La sin llave (la sin hueso) (metacarpo prehistórico): la palabra museo. Los museos tienen llave (guardias; alarmas; ladrones). Las palabras no. Es por ello que la cédula es la pieza del mes.

La siguiente serie fotográfica fue tomada por un autor anónimo durante la primavera de 2008 en el Museo Regional del INAH en Aguascalientes (ciudad sede de un inmarcesible premio literario). El fotógrafo pretendía documentar una denuncia: señalar el grado de deterioro en que se hallaba un recinto gubernamental y la consiguiente indolencia e ineficacia de las autoridades responsables.

Las imágenes llegan a nosotros con intención distinta. Pura. Completamente despolitizadas. O sea completamente re-politizadas. Arte povera sin número de oficio ni clave administrativa. Remix del ISO-9000 en ubi sunt?… Arqueología anticipativa: ¿cómo se verá dentro de cien, doscientos años, la infraestructura cultural (la administración pública) (la conciencia estética)?…

Un viejo verde espiando el baño de sus nietas a través del ojo de una cerradura.

Con subtítulos.

…Pero antes, el mensaje de nuestros patrocinadores:

Un rey jubilado

Rechazó el copón de Librium.
Dijo: “veré televisión
mientras regresan”. No entendió
que se trataba de cruzar la gran Puerta de Cuerno,
de enloquecer a tiros en un país distante,
de recobrar en un lago sin ventura
la joya sumergida.

Ellos lo amaban:
le besaron el rostro y soportaron
el regusto a peste negra de su aliento.

Alcanzó a ver medio juego de beisbol.
Después cayó dormido

sobre el trono, mientras villas y palacios
eran pasto de espadas enemigas.
Al volver –heroicos, paranoicos–, sus hijos
encontraron los huesos aún intactos
frente al invierno sin señal de la pantalla.

(También podría llamarse: Driving
Mrs. Euridice. O en lengua
menos infernal: El chofer
de la señora Musa.)