No. 62 / Septiembre 2013 |
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Don Álvaro Mutis, en los 90 años de edad
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Por Fabio Jurado Valencia |
La personificación de la geografía, cuyo antecedente simbólico está en La vorágine, constituye la impronta más conmovedora de la obra de Mutis. Maqroll aprehende de Cova, el personaje de La vorágine, la visión enfermiza de un mundo que a la vez es majestuoso y corrompido; las fiebres son el síntoma del desajuste entre la naturaleza y el hombre, quien lucha por gobernarla; en el desenlace de esta confrontación aparece la desesperanza, el sentimiento de la derrota y la impotencia frente a las miserias del mundo. Exilio, errancia, aislamiento, ensueño, insolación, delirios y premonición trágica arropan al protagonista que habrá de permanecer en la saga de Mutis. Maqroll padece el mundo, como si representara la condición humana toda. Los círculos del infierno aparecen dentro de los hospitales pero también en el viaje por las aguas; la poesía es definitivamente la ruta más potente para la anagnórisis; por eso Maqroll nos narra sus presentimientos y, paradójicamente, proporciona señales para saber continuar. La narración en el poema o el poema en la narración constituye, sin duda, el enganche del lector en la obra de Mutis; es el lenguaje, no tanto el hecho o el fenómeno, lo que eleva la calidad estética de la obra de Mutis; nos atrapa el ritmo y la efusión lírica, ese tono de canto y letanía que converge en la fuerza de la interpelación, como puede leerse también en El sueño de las escalinatas, de Jorge Zalamea: interrogan el sentido de nuestra existencia en la época del deterioro de la humanidad. La celebración de los 90 años de edad de Álvaro Mutis ha coincidido con la presentación del número 100 de la Colección Viernes de Poesía, del Departamento de Literatura, de la Universidad Nacional de Colombia. Reseña de los Hospitales de Ultramar es el número 100 de esta colección, en una edición especial. Viernes de Poesía le rinde homenaje a la vida y obra de Mutis y a la revista Mito.
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