No. 78/Abril 2015 |
David Greenslade Poesía de Gales |
Por Richard Gwyn
David Greenslade David Greenslade ha vivido una vida variada en cuatro continentes. Su primer libro publicado fue un estudio de la lengua galesa y la cultura en los EE.UU. y Canadá. Lo hizo mientras vivía en EE.UU. (durante seis años) y antes que en Japón (donde fue ordenado como monje Zen), que se sentía capaz de mirar a Gales desde la distancia. Recuperó su uso del galés, un idioma hablado en la infancia, y su segunda publicación (Burning Down the Dosbarth, 1992) fue una colección de poesía política que respondió a su propio sentido de la pérdida de la lengua y a su recuperación. Desde entonces ha publicado trabajos en galés y en inglés. También ha vivido en el Oriente Medio, y sus libros reflejan un cosmopolitismo inconsciente mientras permanece arraigado en localidades específicas, y que refleja su interés en los grandes temas, a medida que pasan a través de su vida. Estos temas van de la alquimia a la zoología, lo que le hace ser etiquetado como un "surrealista moderno tardío". Su trabajo a menudo presenta dificultades de clasificación debido a la gama de los intereses difusos que ocupan su atención: da voz a las verduras (Creosota, 1996) o los objetos se otorgan subjetividades sublimes (Cada objeto roto, 2000). Una obra en lengua galesa, Lladd Nadroedd (Matando Serpientes), −basada en una experiencia en Sorbia, Alemania del Este−, dio lugar a un programa de televisión en el que Greenslade envolvía individuos, grandes objetos y grupos de personas en los abundantes pliegues de piel de una serpiente metafórica (vellón agrícola). En otra ocasión rodeó la ‘Welsh Office’, un edificio del gobierno en Cardiff, con una ininterrumpida línea de sal. Uno de sus intereses permanentes ha sido el de asociar sus textos con el arte gráfico. En casi todos sus libros incluye el trabajo de un artista visual en colaboración. Ahora él mismo trabaja con artes visuales. Además de reconocimientos en poesía ha ganado premios como ensayista y cuentista. También es autor de una novela, Celtic Hot Tub (2003). Su biografía sobre una viajera omani, Ibtisam al Habsi and her Zanzibar Court, fue publicada por el Ministerio de Patrimonio y Cultura de Omán. En 2015 se publicará The City of Opal Altars, ilustrado por él mismo y con traducciones (de Dagmar Stepankova) de la obra del poeta checo Josef Janda. |
David Greenslade Pueblo Ella es una reciente esposa y él le está mostrando el lugar. Las descripciones son cada vez más inverosímiles. La madre de él se atragantó en el club de rugby. El hijo de él se suicidó. Ella enterró a todos sus hijos. Ella estuvo encerrada hasta que su esposo murió. Nadie de esa familia me voltea a ver nunca. Él los abandonó. Él es el hombre más viejo de Gales. Ella se robó los fondos del catecismo. Él se levantó de entre los muertos. Ella nació de un huevo pinto. Son joyas blandas en la corona de sus "¡Buenos días!" Se va cansando y quisiera que nadie lo describiera nunca. Su cuerpo se encoge, volviéndose una sucia esponja bebiendo de la canaleta de su infancia. Los lloriqueos de sus comentarios se ennegrecen con el aceite de cocina de un millón de apresuradas comidas. Cómo es él un par de pies hipnotizados y distantes. Dos niños contemplan dentro de este par de maravillosos zapatos, pero una fuerza electromagnética impide que nadie más los use. La esponja se hincha: cargada de salsa, sangre y agua. La sedienta esposa la aprieta contra sus labios. Lo escupe a él contra el muro. Continúan con su paseo por el pueblo. Fishbone, 1993. Village She is a new wife and he is showing here around. Each description becomes more incredible. His mother choked in the rugby club. His son committed murder. She buried all her children. She was locked away until her husband died. No one in their family ever looks at me. He deserted. He is the oldest man in Wales. She stole the Sunday School Fund. He rose from the dead. She was born from a speckled egg. They are soft jewels in the crown of his ‘Goodmorning!’He grows tired and longs never to be described. His body shrinks, becoming one filthy sponge drinking from the gutter of his childhood. The sobs of his observations blacken with the cooking oil of a million hurried meals. How he is a pair of detached, hypnotised feet. Two boys gaze into this marvellous pair of shoes, but an electromagnetic force prevents anyone else from wearing them. The sponge swells – heavy with gravy, blood and water. The thirsty wife presses it against her lips. She spits him out against a wall. They continue with their tour of the village. Fishbone, 1993.
Tienda de artesanías Éste es el cementerio. Tranquilizantes fijos y congelados, resueltos en cubitos inflados: prácticos pero fríos y angulares a la hora de tragarse. Allí donde Blarney lame las costas de Efnisien. Aquí todas las calcetas políticas se escurren hacia abajo y las vestimentas elegantes del sufragio condicionado y la herencia secuestrada son finalmente propiedad del crudo penique. Murmuraciones que se han quedado sin cera. Nadie obligó a la tienda a convertirse en una falsificada nota en su propio pueblo. ¿A quién le sirven estos inútiles algoritmos: haciendo el tonto con cualquier tipo de elección? Inventario de anticuada manteca en una época de rehabilitación prensada. ¿De quien eran esas cuentas de vidrio tan pulidas? ¿Esos panes remojados en leche? Vagas formas que pasan por la dislocatable quijada y se hunden en la garganta reptil de la caja registradora. Donde, disfrazadas de comercio, se les reconoce mejor por lo que siempre fueron en realidad. Un botín. Cualquier cosa, al final de una visita pormenorizada en un recorrido de prendas clasificadas. Los mercaderes le enseñaron a Simbad como cogían un trozo de carne —a veces el cuerpo de un esclavo— y lo lanzaban atado a una cuerda hasta el fondo del cañón, sacándolo con las piedras preciosas que se le habían incrustado. Estas tiendas son trozos de carne. Cambrian Country, 2000 Craft Shop This is the graveyard. Tranquilisers fixed and frozen, decided into swollen cubes – convenient but cold and angular to swallow. Where Blarney laps Efnisien’s shore. Here political stockings all fall down and the fancy costumes of conditional suffrage and appropriated heritage are finally the naked penny’s own. Whispers that have run out of wax. No one forced the shop to become a counterfeit note in its own town. Whom do these useless algorithms serve – making a fool of any sort of choice? Inventory of antiquated lard in an age of pressed rehabilitation. Whose over—polished glass beads were they? Whose milk-dipped sops? Vague shapes passing through the dislocatable jaw, into the till’s reptile gullet. Where, disguised as trade, they are better recognised for what they always meant to be. Takings. Anything, at the end of a retail visit on a tour of classified tokens. Merchants showed Sinbad how they took a lump of meat – sometimes the body of a slave – and hurled it at the end of ropes down into the canyon, hauling up precious stones embedded into it. These shops are lumps of meat. Cambrian Country, 2000. Chícharos Chícharos. Puños de acero. ¿Nunca te has puesto unos? Guantes de Box. ¿Nunca has abierto una vaina? ¿Cortado una estaca de chícharos? En tu cara. Locos todo el tiempo. ¡Eso son los chícharos! Llegan fuertes; reventando las costuras; intentando hacerse con los gobiernos; contenidos por piezas sueltas de cabe constitucional. ¿Por qué iban a perdonar? ¿O a secarse las lagrimas? Es su depresión; su manera de hablar; su preñez. Así hacen las cosas. Hablan con quien se les da la gana, y pagan las consecuencias, lo aceptemos o no. ¿Cómo lo sé? A los ocho años hablaron conmigo. ¿Qué me dijeron? Dijeron: "no te metas. Somos chícharos. Así le hacemos." Nunca lo olvidaré. Creosote, 1996. Peas Peas. Knuckle dusters. Ever worn a set? Boxing gloves. Ever shelled a pod? Cut a peastick? In your face. Crazy all the time. That’s peas! Coming on strong; bursting at the seams; trying to run the government; held back by lousy bits of constitutional string. Why should they forgive? Or dry up their tears? It’s their depression; their turn of phrase; their pregnancy. That’s how they do things. They’ll talk to who the hell they like, and suffer the consequences, whether we approve or not. How do I know? When I was eight they spoke to me. What did they say? They said, “you stay out of this. We’re peas, this is our way.” I’ve never forgotten that. Creosote, 1996. Camaleón Hijo de camaleón, camaleoncito, Chameleon Once a chameleon always a chameleon, Carnaval Por la mañana al echar atrás Homuncular Misfit; PS Avalon 2011. Carnival In the morning when I push Homuncular Misfit; PS Avalon 2011. Cuota prometida Cuando la devoción sustituye a los argumentos es que una Inquisición viene en camino
Mantuve cinco promesas esta semana y ni una más. Promise Quota When piety replaces argument an Inquisition is on its way
I’ve kept five promises this week and can’t keep any more. Rarely Pretty Reasonable, Dark Windows Press, 2013 Zanahorias LLegaron a la tierra con una banda de forajidos bodhisattvasque buscaban la manera de fracasar. Pero se amotinaron. Su castigo: ser dejadas atrás al partir la nave. Abandonadas por su bajel, se aferraron a las descripciones, perdieron el uso de la ironía y el argumento, ganaron en tropo; descendiendo en un largo entrecejo, decididas a quemarse con un brillo adjetivo paranada ambiguo. Cuando las arrancamos del suelo, recuerdan entre ellas los primeros días, corriendo de parque en parque besando el polvo del poniente, habiendo dejado atrás el humo taoísta y la hipérbole jainista. Todavía se mueve la punta transparente, un relajado pene soñando con jardines en el cielo. Creosote, 1996. Carrots They came to earth with a company of rogue bodhisattvas looking for opportunities to fail. But they mutinied. Their punishment – to be left behind when the craft departed. Abandoned by their vessel, they clung to description, losing the use of irony and argument, gaining trope; descending in one long frown, determined to smoulder with an unambiguous, adjectival glow. When we pull them from the soil, between themselves, they remember the early days, running from park to park kissing the western dirt, having forfeited Taoist smoke and Jain hyperbole. The transparent tip still moves, a relaxed penis dreaming of gardens in heaven. Creosote, 1996. Un lobo sigue a un hombre Un lobo sigue a un hombre hasta el refugio El hombre reza y se imagina armas, El hombre no puede trascender al lobo, El hombre sólo puede pensar en el lobo, ¿Cómo es que terminamos juntos en la iglesia? El lobo, cuando llegue hasta el hombre Homuncular Misfit, 2011. A Wolf follows a Man A wolf follows a man into the refuge Imagining weapons the man prays, The man cannot transcend the wolf, The man can only think of the wolf, How did we end up in church together? The wolf, when he comes upon the man, Homuncular Misfit, 2011. Éste es un país Éste es un país Burning Down the Dosbarth (1992). Here’s a country Here’s a country Burning Down the Dosbarth (1992). |
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Muestra poética:
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“Introducción a la poesía de Gales”, Pedro Serrano, Muestra poética:
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